El audio continúa ganando terreno en el sector editorial. Al menos así lo evidencias las más recientes cifras presentadas en junio por la Audio Publishers Association, APA y en la conferencia de audiolibros en la Feria Internacional del Libro de Fráncfurt de 2018, en donde se asegura que los ingresos por audiolibros aumentaron un 22,7% en el año inmediatamente anterior.
Muestra de ello son las plataformas, como Storytel o la sección de audiolibros de Google, que han venido abriendo mercado en el último año, tanto así que, en el “Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros 2018”, presentado en enero de 2019 en España, se analiza pro primera vez el uso de los audiolibros por parte de los lectores (según este estudio el 2,5% de la población de 14 o más años escucha audiolibros con frecuencia al menos trimestral. Un 1,1% lo hacen frecuentemente, al menos una vez a la semana). En 2016 se presentó el informe de la “Evolución del libro electrónico en América Latina y España”, en el que se señalaba que la producción de audiolibros superaba los 3000 títulos.
Las cifras demuestran que el mercado de los audiolibros viene en ascenso y que su participación seguirá siendo un tema de conversación que tendrá que ser medido, porque los lectores están cambiando y más allá de reconocer el audiolibro como una forma o no de lectura, los consumidores están ahí buscando alternativas.