Los pequeños Jekyll y Hyde tienen gustos distintos y formas de comportarse diferentes. Tienen la misma edad, pero mientras uno disfruta de ordenar, escuchar música clásica y ver su ropa bien limpia; el otro quiere armar un campamento, saltar con el rock y lucir las manchas que se hace jugando. Sin embargo, a pesar de sus diferencias, al final del día, ambos pueden reconocerse el uno en el otro.
Su autor nació en Bogotá, Colombia en 1973, es un escritor y profesor universitario, ganador del Concurso Nacional de Cuento Ciudad de Bogotá, 2009 y del Concurso Nacional de Literatura Infantil y Juvenil de la Universidad Central 2018. Es, además, papá, lo cual lo ha hecho incursionar en la escritura de cuentos para niños.
En este cuento vamos a ver cómo los dos personajes se intercalan la narración para contarnos sus gustos, costumbres, actividades que hacen día a día y todo aquello que nos hace conocerlos. Los textos se intercalan con excelentes ilustraciones de Andrés Rodríguez, las cuales, página a página, nos hacen conocer mejor el mundo de los pequeños Jekyll y Hyde. La combinación armónica entre texto y dibujo crean una historia que se hace sencilla de leer y entender teniendo en cuenta el público objetivo.
¿Te resultan conocidos estos nombres? En efecto, este cuento podría ser visto como una versión para niños del clásico El extraño caso de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Pero en este caso el acercamiento con “el otro” esta mediado por la rima, el juego, la simpatía y el cariño.
Una de las mayores virtudes del libro es generar el encuentro entre los opuestos, sin caer en la idea de lo “normal” o lo “adecuado”, en el clásico “el niño bueno en contra del niño malo”. Vemos, por ejemplo, que Jekyll ayuda a los ancianos a cruzar las calles y nos preguntamos antes de cruzar la página: ¿Hyde empujará a los desvalidos al abismo? La respuesta es que Hyde se ocupa de “rescatar y guiar a los insectos en las grietas confundidos”.
Ser distintos no significa estar atrapados en un binarismo perpetuo de extremos irreconciliables. Los pequeños Jekyll y Hyde nos muestra cómo “lo distinto” también es algo en lo que podemos vernos identificados. Esa es la principal característica que lo hace ideal para acompañar a cualquier niño o niña en sus primeros encuentros con mundos desconocidos, como el colegio, en donde pueda jugar con ese “otro” en vez de rechazarlo.
Obra reseñada: Los pequeños Jekyll y Hyde, Editorial 7 Gatos (2018), Miguel Mendoza Luna/Andrés Rodríguez.
Quien reseña: Laura Sofía Carrillo. soficar890@gmail.com.