
El bicentenario Feria 23
Cámara
Colombiana
del Libro
f i l b o 112
2010
11 al 23 de agosto
Invitado de honor:
Bicentenario de
la Independencia
El 20 de julio de 1810, Bogotá vivió el hecho histórico del florero
de Llorente, que desencadenó la independencia definitiva del entonces
Nuevo Reino de Granada en 1819. Todo el territorio hervía
en homenajes aquel 2010 y había dispuesto
conmemorar de todas las maneras posibles
la fecha en que doce poblaciones del
naciente país, como Mompox, el Socorro y
Ocaña, firmaron sus propias declaraciones
de independencia y se sublevaron frente a
los realistas.
Por eso mismo, el pabellón destinado al país
invitado de honor se consagró al Bicentenario
de la Independencia. Varias instituciones
se volcaron a apoyar el montaje de los 3.000
metros cuadrados, entre éstas la misma Cámara
Colombiana del Libro, pasando por
la Gobernación de Boyacá y Bancolombia,
hasta contar, por supuesto, con la Alcaldía
Mayor de Bogotá, por intermedio de su
Secretaría Distrital de Cultura, Recreación
y Deporte, y la Fundación Gilberto Alzate
Avendaño.
Dentro del pabellón hubo exposiciones
cruciales, como la muestra «Impresiones de
la Independencia», curada por la Biblioteca
Nacional de Colombia, que constaba de proclamas,
bandos y hojas volantes que circularon
durante los hechos de 1810; «Palabras
que nos cambiaron», curada por la Biblioteca
Luis Ángel Arango, que giró en torno
a cómo la palabra nos definió y decidió el
derrotero de la nación; «Gritos que cambiaron
la historia», de la Fundación Gilberto
Alzate Avendaño, una exhibición de más de 650 metros cuadrados
que generó una reflexión en torno a la identidad nacional. Por último,
«Boyacá, departamento Bicentenario» ofreció, en 260 metros
Boyacá cobra gran relevancia en la celebración de la
declaración de Independencia del 20 de julio de 1810. La
Ruta Libertadora y la Batalla de Boyacá fueron la excusa
para conocer su literatura y sus atractivos.